Ante la reciente publicación del Decreto de Gobierno de la Generalitat de Cataluña relativa a la intervención de precios en el sector funerario de esta Comunidad, PANASEF (Asociación Nacional de Empresas de Servicios Funerarios) quiere hacer público su total desacuerdo con el mismo, fundamentado en los siguientes razonamientos:
1. Se apunta innecesariamente a las empresas funerarias, acusándolas de que incrementarán sus precios cuando esto es absolutamente incierto.
Los precios siguen siendo los mismos antes y durante esta pandemia, públicos y conocidos por la Autoridad competente.
Adicionalmente, como consecuencia de las diferentes órdenes para preservar la Salud Pública, que desde PANASEF aplaudimos y que fuimos los primeros en solicitar, se han dejado de prestar (y lógicamente facturar) importantes servicios funerarios como las salas de vela, ceremonias y otros artículos complementarios.
2. Cabe recordar que el porcentaje de aseguramiento de los servicios de este sector es altísimo (con tasas medias superiores al 60% y en algunas localidades de hasta el 80%) estando cubiertos las defunciones por coronavirus, al igual que sucede con otras enfermedades contagiosas, según las condiciones de las pólizas contratadas.
3. La principal medida de transparencia que desde PANASEF siempre defendemos, es que antes de la contratación de un servicio funerario se disponga de un presupuesto por escrito, donde las partes estén de acuerdo y se evite cualquier suspicacia sobre los servicios contratados y el precio de los mismos.
4. El esfuerzo de los profesionales funerarios y sus empresas durante estos tristes días está siendo ejemplar. Trabajando incesantemente durante 24 horas al día, exponiendo su salud personal y ofreciendo a la sociedad un servicio imprescindible.
Queremos aprovechar una vez más para agradecer y dar visibilidad a estos profesionales que tradicionalmente son ignorados en la enorme labor que realizan.
Se merecen poner en valor su labor, son el último eslabón de la cadena sanitaria y sin su trabajo, el problema que padece toda España estos días sería insostenible.
5. La solidaridad y colaboración entre distintas empresas nacionales para ayudar a zonas especialmente afectadas está siendo digna de elogio.
Por todo cuanto antecede, por la excepcionalidad y riesgo de la situación que vivimos, nuestros esfuerzos deben centrarse en atender a la sociedad y no en tener que dedicar tiempo a recurrir medidas no fundamentadas, intervencionistas y rara vez vistas en el periodo democrático, cuyo objetivo final, por innecesario, no alcanzamos a entender.