La Asociación Española de Fabricantes de Ataúdes de Madera y Derivados (IBERATAUD) va a solicitar a las instituciones de consumo de nuestro país que se informe a las familias del país de procedencia de los ataúdes.
“Al igual que ocurre con todos los productos que consumimos, creemos que es necesario que las familias, a la hora de contratar un servicio funerario, conozcan la procedencia de los ataúdes. Entendemos que las familias tienen derecho a conocer qué están contratando. Es una garantía para las familias y también para los fabricantes de arcas”, comentan desde IBERATAUD.
PANASEF (Asociación Nacional de Servicios Funerarios) comparte la importancia de ofrecer a los consumidores la mayor información posible. “Como representantes de las empresas de servicios funerarios apostamos siempre por la transparencia. Las familias, que al final son las que contratan los servicios funerarios, deben tener toda la información disponible sobre los productos funerarios, en este caso, sobre el origen de los ataúdes. Por tanto, consideramos que es interesante conocer la trazabilidad de las arcas, al igual que ocurre con productos de otros sectores”, comenta Alfredo Gosálvez, secretario general de PANASEF.
Para IBERATAUD, ahora más que nunca, en las circunstancias que estamos viviendo con motivo de la pandemia por Covid-19, es muy importante apostar por el ataúd fabricado en España.
“Si el cliente decide emplear una caja fabricada fuera de España, naturalmente es libre de hacerlo -concluye IBERATAUD-. Nosotros solo pedimos que sepa de dónde procede ese producto. Su trazabilidad. Al igual que lo exigimos diariamente de todas las cosas que consumimos”.